Las uñas de los pies, sus partes y las funciones de esta barrera protectora natural
Las uñas de los pies, sus partes y las funciones de esta barrera protectora natural

La lámina de queratina que crece en las últimas falanges de los dedos es solo la parte visible de la uña. Crece a una velocidad de 0,1 mm/día normalmente, aunque las de los pies tardan un poco más. Cuando están sanas deben ser de color rosado y lisas.
Partes de la uña
Nuestro podólogo en Lugo reconoce su conformación al describir:
- La matriz: Es la raíz, donde nace la uña a partir de células de queratina. La zona blanquecina de la matriz en forma de medialuna es la lúnula, que marca el límite entre la matriz y la lámina ungueal.
- La lámina ungueal: Es la placa dura desde la lúnula hasta el borde libre. Constituida por tres capas de queratina. Si estas capas están resecas y/o frágiles tienden a separarse. El borde libre es la zona de la lámina ungueal que no tiene contacto con el lecho y que cortamos para su mantenimiento e higiene.
- El lecho ungueal: Es el soporte o base de la lámina ungueal.
- Los perioniquios: Estos tejidos son pliegues alrededor de la lámina, la sellan y defienden de microorganismos dañinos como hongos y bacterias. Son los siguientes:
- Paroniquios: Son los dos pliegues a los lados de la placa.
- Eponiquio: Está encima de la matriz. El eponiquio es tejido vivo, su borde externo es la cutícula constituida por células muertas.
- Hiponiquio:Localizado debajo del borde libre.
Funciones de las uñas de los pies
Las uñas deben cumplir una función de soporte y protección de la punta de los dedos. Si observamos nuestro caminar, es evidente que las uñas sirven de amortiguación contra los choques o impactos de los dedos contra el calzado. Esta función la cumplirán cabalmente mientras estén sanas.
Las uñas se encargan de informar cómo está nuestra salud. Los cambios repentinos en ellas se pueden asociar a cualquier problema del organismo. Siempre será aconsejable observarlas, cualquier alteración en su color, grosor o textura será un buen indicador de la necesidad de visitar a un podólogo.
Vamos a considerar a los atletas, bailarines y futbolistas como los primeros en la lista de quienes sufren lesiones en las uñas de los pies. Estos profesionales tienden a padecer de onicomicosis. El cambio de calcetines, el buen lavado con jabón después de cada entrenamiento, el uso de cremas hidratantes, son claves para evitar este tipo de trastorno.
Por supuesto, debemos prevenir daños a los perioniquios durante la pedicura, pues serían la entrada para hongos y bacterias. Los deportistas pueden prevenir traumatismos al usar el calzado más adecuado para la actividad en la talla debida. Además, sugerimos evitar la uña encarnada con su corte recto.
Una alimentación adecuada nos ayudará a preservar la salud de las uñas. Las vitaminas del complejo B sirven para fortalecerlas, especialmente la biotina (B7). Estas se encuentran en alimentos como: los frutos secos, el pescado y el plátano. Siempre será importante, en el caso de los atletas, visitar al podólogo para revisiones rutinarias.